2 de julio de 2009

El espacio fílmico en “In the mood for love” Won Kar Wai

In the mood for Love, aborda el tema obsesivo de Wong Kar-Wai: el amor, pero lo trata desde una perspectiva muy particular. Sus películas hablan siempre de relaciones infructuosas, de amores que trascienden la idea de unión o consumación; amores que se hacen reales en la distancia, que huyen de lo cotidiano, que carecen de hogar y no buscan un futuro ni nada más allá del momento presente. Las relaciones amorosas en su cine son siempre, sino imposibles, desde luego complicadas e inestables. Sus personajes huyen entre sí, se encuentran en pequeñas habitaciones de hotel, se cruzan por largos pasillos, cuchichean por callejones oscuros, solitarios y malolientes, o se persiguen por aglomeradas ciudades entre multitudes. Se esconden y disfrazan para luego buscarse y reencontrarse, para perderse cuando se buscan y encontrarse sin querer. Los protagonistas de sus películas tienen miedo de amar y/o ser amados, son seres atormentados, sin rumbo. Todos ocultan secretos y arrastran oscuros presentimientos que les llevan a herir a los demás, huyendo a una soledad que les destroza, pero que prefieren a perder algo que no podrían conservar si se entregaran a otro. Tienen miedo de actuar, de entrar en la realidad de las acciones y se quedan siempre en el espacio de los sueños, los recuerdos y los simulacros.
Dentro de la línea que acabamos de trazar, este film se sitúa en el Hong Kong de los años 60, y narra las relaciones cruzadas entre dos matrimonios jóvenes, que se mudan a la vez, a la misma pensión. Lo curioso del film y de lo que se percata inmediatamente el espectador, es de que hay un mundo al que le está prohibido acceder, al igual que a los protagonistas. La cámara nos muestra sólo a un miembro de cada pareja: a la señora Chan y al señor Chow, mientras que nunca nos permitirá ver, nunca encuadrará los rostros de sus cónyuges, quienes quedarán relegados a otro espacio, siempre aludido, siempre presente, pero oculto a nuestros ojos. Durante aproximadamente los 20 primeros minutos de la película escucharemos a estos dos personajes sin cara hablar desde fuera de campo, la cámara nos los mostrará de espaldas, inclinados, o encuadrará sólo medio cuerpo impidiendo siempre que el rostro se haga visible. En este tiempo se muestra cómo se entabla una relación adúltera entre los personajes que habitan el fuera de campo y cómo la mujer de esta misteriosa pareja decide terminar con el romance, al sentirse descubierta. Tras esta aparente ruptura, que se nos cuenta entrevelada, se reconcilian y desaparecen definitivamente del fuera de campo concreto, para perderse en un espacio absolutamente imaginario, al marcharse juntos a Japón. Al abandonar al señor Chow y a la señora Chan, abandonan ese espacio fílmico, en el que el fuera y dentro de campo eran intercambiables. Sin embargo, no desaparecerán completamente, pues sabremos de ellos por alusiones, por cartas, y sobre todo por los juegos de los protagonistas, que tratando de comprender la infidelidad, se convierten por gestos en casi el reflejo perfecto de la relación velada por la cámara. Casi perfecto, porque debido a algún motivo secreto que entierra Chow en el templo de Camboya, no llegan a comportarse igual que los amantes a los que imitaban.
Wong Kar-Wai nos presenta de nuevo, a dos personajes desarraigados, arrojados en medio de un lugar que no les pertenece. Los dos individuos que nos encontramos dentro de campo tienen como único vínculo con la realidad el trabajo, pero una vez salen de ahí se convierten en seres frágiles y erráticos, sin hogar, ni un lazo sólido sentimental. Ambos se buscan tímidamente, y comparten su dolor, pero contrariamente a lo que podría suponerse, no se convierten en amantes, ni se escapan juntos, sino que al final de la película se separan, dando lugar a la segunda parte llamada “2046”. Pero, ¿qué es lo que ocurre? ¿Por qué no surge la historia de amor? ¿Qué es lo que hace que esta película sea tan dura y hermosa? ¿Qué secreto murmura Chow años más tarde en un templo budista? ¿Por qué los protagonistas nunca vuelven a reunirse?

El título“In the mood for Love”: ¿A quien o quienes se refiere?

En castellano el título se ha traducido por “Deseando amar”, lo cual tiene unas connotaciones diferentes de las que se pueden extraer del original. “In the mood for love” no tiene una traducción literal que se corresponda con una expresión en castellano, pero si queremos aproximarnos a su significado, el título vendría a decir algo así como “con disposición al amor”, o “con un estado de humor propicio al amor”, en el sentido de que habría una cierta tendencia a amar o enamorarse. Por tanto, el título habla de cierta facilidad, de una disposición, de un estado de ánimo que haría factible y fácil el amor. “Deseando” supone una tensión, se desea aquello que no se posee y por tanto exige un esfuerzo, desear es querer, es decir, en este caso desear sería “tener ganas de amar”, aunque no necesariamente sentirse con fuerzas para ello. Por otro lado, en disposición o con un estado de humor propicio al amor, hay simple receptividad, una facilidad para enamorarse, como efectivamente tienen los dos protagonistas, que se sienten solos y traicionados, y que por eso son más vulnerables a las muestras de afecto. Este estado de debilidad ante un sentimiento que se puede o no querer, se enfrenta al deseo como voluntad y como urgencia. Se puede tener humor para enamorarse, igual que se pueden tener las defensas bajas para contraer el virus de la gripe, y no obstante no desear contraerla. Por tanto, enamorarse con facilidad, no es lo mismo que desearlo, aunque se pueden dar ambos estados a la vez. Por otro lado, desear amar no implica que haya una facilidad, se puede querer o desear amar desesperadamente, y ser incapaz de enamorarse o de amar a alguien.
Por un lado, el título hace referencia a los protagonistas, que no buscan enamorarse, aunque se sientan en disposición para ello, no desean amar. La situación les invita a arrojarse en los brazos uno del otro, pero ellos luchan contra la atracción que los empuja a buscarse. Esto resulta chocante, porque en principio nada sería más sencillo y lógico, sus parejas les engañan entre sí, y ellos pasan la mayor parte del tiempo libre juntos. Son jóvenes, se atraen, se comprenden y no tienen hijos ni ataduras. Sin embargo no quieren, se niegan y resisten a la inevitable pasión que les obliga a amarse.
El drama, que emerge de la banda sonora, no radica en la incapacidad de amarse, sino en la desesperación que provoca tener que rechazar dicho sentimiento, que tan fuertemente se apodera de ellos. Lo difícil no es amarse, lo que les resulta imposible es la relación. Pero el motivo que les obliga a sacrificar su amor sigue escapándose entre líneas, porque no puede resolverse simplemente por puritanismo, o por miedo a la censura moral, pues son sus parejas las que han cometido adulterio primero, y de hecho sus matrimonios se disolverán finalmente. Es decir, que los protagonistas podrían haber rehecho sus vidas juntos, en otro lugar.
Por otra parte, el título original también aludiría a las parejas de los protagonistas, que habitan el fuera de campo siempre amenazante y aludido, pero al mismo tiempo inaccesible. Estos otros dos personajes estarían también “In the mood for love”, pero al contrario que los protagonistas, ellos sí desean amarse y no se han resistido con la misma obstinación, sino que se han abandonado al amor y a sus consecuencias.

Relaciones especulares entre elementos dentro y fuera de campo

Las historias que transcurren y se cruzan en la parte visible del film componen un juego constante de espejos, y de igual modo, lo que se oculta, se refleja en lo que se nos muestra. Entre los personajes de la película se dan varios tipos de relaciones especulares, que los convierten en reflejos y dobles unos de otros.
La señora Chan es la secretaria de un hombre casado que tiene una amante, y se encarga de comprar los regalos para ambas, -que son los mismos para las dos-, de recoger sus recados, de organizar sus citas, etc. Ella se ve a sí misma reflejada en la esposa de su jefe, pues su marido, también tiene una amante, y también les hace los mismos regalos a una y a otra. Este paralelismo se repite además con el señor Chow, a quien también su mujer le regala la misma corbata que a su amante. Pero no sólo se identificará con la mujer de su jefe, sino también con la amante de éste, cuando al igual que ella pasa sola su cumpleaños en espera de su marido.
La soledad es un elemento fundamental que interrelaciona a todos los personajes, hasta convertirlos en dobles unos de otros. Las dos parejas se cruzan por problemas laborales, el señor Chan viaja mucho, y a penas tiene tiempo para estar con su mujer, que cena siempre sola. El señor y la señora Chow tienen horarios incompatibles, cuando él trabaja ella duerme y viceversa, y como le comenta intencionadamente el señor Chan al señor Chow acerca de su mujer: “debe ser muy duro para ella”, estar tanto tiempo sola. De esta forma vemos cómo la señora Chan y la señora Chow tienen en común la soledad por falta de sus maridos, además de acostarse con el mismo hombre y recibir los mismos regalos. Esta soledad arrastrará por tanto primero a la señora Chow y al señor Chan a ser amantes, y después a los protagonistas, que reconstruirán dicha aventura para comprenderla, primero como un juego, repitiendo los actos que suponen realizaron los otros, pero finalmente, realizar los gestos del amor les llevará a amarse realmente.
Por otro lado, el juego de espejos se repite entre el señor Chow y la señora Chan, no sólo por el hecho de ser objetos del engaño, de sus recíprocas parejas y ser abandonados por ellas, porque ya desde la primera escena coinciden en que ambos se mudan al mismo edificio y piso, el mismo día, y han de encargarse solos de la mudanza, pues sus parejas están trabajando o de viaje. Los dos personajes se sienten abandonados, cenan solos y terminan quedando para cenar juntos, y descubriendo que sus correspondientes parejas, se han escapado juntos a Japón. Así su historia comienza a la sombra de sus conyugues. Quieren negar la ausencia de sus parejas imitando a esas personas que ocupan el lugar que ellos deberían ocupar, de sus rivales, tratan de conocer a esos desconocidos que les han arrebatado a sus seres queridos, y a la vez sentir que el otro no se ha marchado, que sigue allí. Se buscan como hicieran los otros y se alían para primero comprender que ocurrió entre los amantes, para apoyarse en su situación, pero poco a poco construyen unos intereses en común y empiezan a crear una historia propia y común, hasta el punto de confundir realidad y ficción. Sus vidas se cruzan como si se miraran en un espejo, comparten un secreto que ambos luchan por ocultar y que les aplasta, pero esta alianza no les libera, sino que les ata más.
No obstante, las relaciones especulares con incompletas, ellos son un mero reflejo sin vida propia, carecen de corporeidad, no pueden amarse más que a través de los cuerpos de sus parejas, lo que a la vez les dificulta entregarse por completo. De esta forma, poco a poco se irán difuminando y perdiendo los paralelismos, tanto entre la pareja visible y la invisible, como entre los dos personajes protagonistas. La relación se complica porque no se entregan por igual. Él da por perdida a su esposa, que le envía una carta en la que suponemos que termina con él, mientras ella sigue esperando a su marido y ensayando cómo se enfrentará a él cuando regrese. Lo suyo no puede durar, una noche el señor Chow se declara enamorado y le reprocha que ella no vaya a abandonar a su marido, por lo que ha decidido que se va a marchar porque no soportaría verla con él cuando regrese de Japón. Entonces ensayan la despedida, y esto nos recuerda a la relación de los otros dos, que después de estar a punto de ser descubiertos por la señora Chan, la señora Chow termina con la relación, y se echa a llorar en el baño, entonces el señor Chan va a buscarla a su habitación y posteriormente se escapan juntos a Japón. Con los protagonistas ocurre igual, deciden ensayar la despedida después de la declaración Chow, pero la señora Chan se derrumba y se echa a llorar, demostrando que ella también se ha enamorado de él, y entonces empiezan a acostarse, convirtiéndose en amantes.
Pero el espejo se rompe cuando deciden embarcarse juntos como los otros. Ambos acuden a esa habitación, la “2046”, donde consumaron presumiblemente su relación amorosa, pero no se encuentran, porque él no espera mucho y ella llega demasiado tarde.
La primera conclusión que sacamos es que son demasiado cobardes, tímidos y orgullosos. Años mas tarde, se vuelven a buscar, pero no se atreven a encontrarse, ambos han roto sus matrimonios, son libres, incluso es posible que tengan un hijo en común. Así que continuamos preguntándonos. ¿Por qué? ¿Qué les impide estar juntos?

El secreto de 2046

El juego principal que ejercen el fuera y dentro de campo, es el de invertir lo que el relato habitualmente nos mostraría como importante. Wong Kar-Wai nos muestra esos momentos que el relato suele obviar, en que no ocurre nada, sino el puro tiempo. Aquí los personajes no se convierten en héroes que han de luchar contra el destino, sino que están perdidos, el tiempo les zarandea y carecen de un papel propio, de una meta, de un sentido. Ya sabemos cómo son las aventuras amorosas, parece insinuar Wong Kar-Wai, os voy a enseñar sus límites, lo opuesto al amor, su concepción y su muerte, los límites, los “casi”, los todavía no, y los demasiado tarde. Convierte en el secreto del que somos cómplices a la relación entre los personajes engañados y abandonados, entre los pasivos y vacíos personajes que hablan, imitan y se dirigen hacia un espacio que nunca alcanzamos, que es el de la acción, el terreno donde ocurren las cosas, donde cada personaje tiene su misión, un mundo fantasmal que si bien nos resulta invisible, lo conocemos gracias a sus parejas, gracias al reverso de lo que no hacen los protagonistas. Ni siquiera podemos ver la acción de estos personajes cuando realmente actúan, porque esta película no trata de acciones sino de reflejos, de cristales borrosos y opacos, y en ellos debemos adivinar la realidad. Los personajes de acción se nos dan a conocer por alusiones, por objetos que aparecen y desaparecen, que se repiten, por vagos planos que no nos ofrecen jamás un rostro, y por voces que proceden de más allá de nuestro campo de visión. A nosotros, como a los protagonistas, solo nos queda imaginarlos a través de sus parejas, presuponer su amor y sus conversaciones. El marco se dibuja alrededor de dos personajes incapaces de separarse de esa mancha y traición. Nosotros participamos de ese lado donde precisamente no ocurre nada, donde el amor está atado, amordazado. Parece que no pudieran habitar el mundo de sus esposos, que estuvieran condenados a buscarse porque les han abandonado en el mismo lugar, ellos habitan el mismo mundo y comparten ese secreto que les empuja al uno contra el otro, pero que imposibilita su relación.
El desencuentro es continuo y frustrante, toda la tragedia del film radica en la paradójica cuestión del tiempo que se refleja en la ralentización de sus movimientos, por los que parecen suspendidos en la banda sonora. Los relojes están siempre presentes y son la clave para la imposibilidad de ese amor, que se produce en el momento equivocado, los horarios hacen imposible sus respectivos matrimonios. Entre ellos se hace posible la relación por la relación porque están abandonados por sus parejas e igualmente eso les impide estar juntos. En una ocasión él le pregunta a ella “¿y si no te hubieras casado?”, que parece aludir a la posibilidad de haber estado juntos si se hubieran conocido “libres”…De aquí extraemos la primera paradoja que se expresaría así: si sus parejas no les hubieran engañado ellos no hubieran intimado, pero como sus parejas fueron quienes les empujaron a enamorarse, su relación no puede llegar a ningún lado, porque la sombra de los otros planea sobre ellos. No se van juntos porque ella es demasiado tímida, y él un cobarde orgulloso que no se atreve a ir a buscarla cuando ve que se retrasa. No podrían estar juntos porque son el recuerdo de los otros, porque les persigue el recuerdo del engaño. Ocupar el lugar virtual de aquellos que los abandonaron, les impide construir un futuro real juntos. No son iguales a los otros porque rompieron el espejo y así se liberaron de ser como ellos, pero para ello sacrificaron su amor.
La segunda paradoja consiste en lo implacable del tiempo sobre los sentimientos, que les hace olvidar el dolor del engaño liberándolos de sus espectros, pero también acaba la pasión que les arrebató en el pasado. Así que años más tarde, cuando ya son libres, es demasiado tarde para enamorarse y volver atrás, ya no están “In the mood for love” sino que aunque lo deseen, ya no pueden amarse, como les ocurre en “2046”, ahora se han vuelto fríos, duros, incapaces de amar. Se buscan, están a un paso el uno del otro, pero ya sólo conservan cenizas de otro tiempo, sólo recuerdos.
Finalmente descubrimos que el la clave del misterio era un secreto a gritos, inscrito en las leyendas que abren y cierran la película:

“Ella era tímida, bajaba la cabeza para darle la oportunidad de acercarse, pero él no podía por su falta de coraje.”

“Él recuerda aquellos años como si mirara a través del cristal de una ventana cubierta de polvo, el pasado es algo que podemos ver pero no tocar, y todo lo que se recuerda es borroso y vago”.

Están condenados a amarse a través imágenes virtuales de otros, porque lo que buscan es un reflejo del pasado, y no encuentran más que dobles de sí mismos, gastados y ridículos. Siempre es demasiado tarde.

10 de mayo de 2009

Otro Sapo Azul...

Perseguía una huella falsa y me di de bruces contra mi propio autoengaño , ¡toma ostia en todo el cabezón!...

Un lindo caballero, demasiado lindo y demasiado caballero...eso siempre termina derivando hacia la derecha...profunda y arraigada costumbre de elevar sobre elegantes corceles a lo más rancio y podrido de la sociedad...

Y ahora me quedo de nuevo sin ilusiones, viendo partir hacia la oscuridad al que fuera un dulce espectro que sin mirarme se ha vuelto en el amargo despertar de mi ensueño, al mostrarme sin mirarme ese horrible rostro de la ideología conservadora y absurda...sin decirme nada, me ha gritado en la cara que es una prolongación de la Verdad Oficial, un nimio juguete del pensamiento dominante...por eso trabaja para el aparato de Información del Estado...por eso no es más que un objetivo y una sonrisa...malvada y perniciosa sonrisa..que me sedujo, y aun hoy me da jaqueca, sólo de pensar que por un imbécil he podido perder un poquito la razón...

¿Tan difícil es encontrar un poco de bella inteligencia en esta superpoblada ciudad?

1 de mayo de 2009

imágenes de mi ciudad

Ruedan las palabras como piedras, arrastran consigo muchas cosas- hasta gente-, caen al vacío y todo el mundo las olvida, se olvida su sonido, su fuerza, sus muertos y heridos.
Tu mirada atrapada en ese cuerpo que se escapó tras la tempestad, busca una respuesta entre tantas imágenes que no dicen nada, que ocultan la realidad.
Vamos de la mano agitando nuestros cuerpos tristes, vadeando enfermedades que no conocemos, pero que apestan a gobiernos, laboratorios y dinero.
Se cierran los bares, abren las cavernas de la cocaína, donde mujeres fantasmagóricas se arrastran por los servicios tras polícias que cambian polvos por polvos.
Gritamos que las calles deberían ser nuestras, que ya no hay nada que comer, que el trabajo nos oprime cada vez más y que la cárcel se ha convertido en el nuevo edén.
No sabemos nada, no escuchamos nada, sólo nos queda imaginar, escapar de las celdas oscuras del hospital, del psiquiátrico, del penal...o desde allí soñar la libertad.
El mundo, cada vez más hostil no para de parir niños en los vertederos, de encumbrar monstruos en los telediarios, y entre lapidación y lapidación alguien grita: ¡Olvidemos!.
No quiero decir quien es bueno y quien es malo, pero no me callaré el dolor de tu marcha, la rabia de su silencio, no dejaré de denunciar vuestra apatía, y su hipocresía.
Te has quitado el velo y él la armadura, os amáis como bestias bajo la luna de azufre , entre el hollín de tu fábrica, y la grasa de su taller, ambos presos del tiempo de la ciudad.
Se han roto más cabezas contra el cristal de un escaparate, quienes te vigilan también te agreden, y las cámaras sólo ven aquello que los dueños quieren proteger.
Estoy harta de tanto asfalto, tantos carteles y bocinas, no quiero tanto uniforme y cartones, estoy cansada de esta naturaleza artificial, que necesito, que amo y odio, tanto como a tí...
Arroja lejos la rutina, arráncate las cadenas del día a día y condúceme hasta ese laberinto donde nada tenga sentido y sólo la sangre marque el destino.
Ya no quiero buscarte virtualmente
Ni temblar más aguardando tu sombra.
Ya me cansé de esperar una señal.
No me interesa saber si eres Goku o un lobo,
solo quiero rasgar tus ojos y comerme tu corazón,
arrancarte de tu objetivo, obligarte a conocerme
sin pantallas, visores, teléfonos o monitores.
Nada de enigmas, nada de risas cómplices...
Desarmémonos y hablemos sin muros...
Quiero que observes conmigo la realidad
desde lo más alto del más alto precipicio del mundo,
y me digas que es tan hermosa y cruel como siempre,
tan grande e insignificante,
tan apocalítica y aburrida,
tan oscura y brillante
como antes de conocerme,
pero que ya nada es igual,
y que no te importa lo que ocurrra
mientras nuestros cuerpos luchan sin piedad.
Quiero que me digas que tú también
anhelas otras formas de decir y de ver,
que comprendes el deseo en mis pupilas
y que me regales el grito escondido en tu sonrisa.
Quiero oirte susurrar que te perderías en mi ombligo
y que apretándome con todo tu cuerpo me sacudirías
los miedos y nostalgias, hasta hacerme desfallecer de placer.
Quiero que me dejes arañarte hasta desgarrarte la piel...
y luego lamerte las heridas, para renacer juntos frente al mar,
embriagados, al amaneceer, tras un viaje psciotrópico a Nunca Jamás.

10 de abril de 2009

La Ola, o la corrupción de poder



La película de Dennis Gansel, "La Ola", no es una gran obra desde el punto de vista de la realización, tampoco tenemos nada especial que destacar en el montaje, ni en la forma narrativa. Nada que no hayamos visto en multitud de películas de presunto realismo social, sobre bandas adolescentes, drogas, violencia y marginación, a lo que se añade un leve toque documental (tan de moda) pues se basa en unos acontecimientos reales, y por supuesto no pueden faltar los estereotipos y topicazos del género.
Lo que hace interesante la película, es la temática, que parafrasea la experiencia que tuvo en 1967 Ron Jones, un profesor antimilitarista estadounidense (cuya biografía, bastante interesante, podeís leer aqui: http://www.ronjoneswriter.com/index.html) .



La Ola reproduce más o menos en esencia las características del experimento que llevó a cabo Ron Jones para explicar la mentalidad nacionalsocialista, a un alumno incrédulo que puso en duda la expansión tan rápida de la ideología nazi en Alemania. Este experimento consistió básicamente en reproducir y aplicar a un grupo de alumnxs durante una semana, los métodos de adiestramiento nazi, basados principalmente en la creación de una identidad y cohesión de grupo, fortalecida por la definición de un enemigo como alteridad absoluta, la adoración de un líder, y la supeditación de los individuos al conjunto, mediante la abnegación, la uniformización y la disciplina. Tanto en la realidad como en la ficción, el experimento surtió un efecto demasiado rápido y efectivo, es decir se les fue de las manos a ambos profesores, sin embargo, las fatales consecuecias con las que concluye el film nunca ocurrieron en la realidad. Ningún niño se mató ni disparó a nadie.
La acción de La Ola se sitúa en la Alemania contemporánea, y quizás por los ecos que pueda tener el hecho de que el personaje real sea conocido como "el poeta del punk", se presenta al protagonista como un profesor rockero, rebelde e inadaptado. La película, más allá de mostrar un tipo de acontecimiento ocurrido, pretende imprimir su propia ideología: reduce a lo mismo dos formas políticas antagónicas entre sí, (pero opuestas ambas a la democracia capitalista que se defiende), es decir, iguala nazismo y anarquismo, como dos movimientos vacíos y meramente estéticos, propios de tribus urbanas adolescentes.
Se encamina por tanto a lxs espectadores con unos fines ideológicos evidentes, a través de la evolución psicológica de los tres personajes principales, esbozando en cada unx de ellxs, a partir de una opción vital estereotipada y reduccionista, un modelo moral y político. De esta manera, nos encontramos en primer lugar con un profesor "guay", incomprendido y despreciado por sus colegas, que encuentra en La Ola, la forma de imponerse y de hacerse querer, en lugar de retando las normas establecidas, asumiendo la autoridad de un líder. De esta manera, el profesor que supuestamente defendía en un principio, los ideales de la libertad y la anarquía, y que por tanto creería en la abolición de las jerarquías, de las desigualdades y de las injusticias, se presenta como un mero acomplejado rebelde, que en el fondo solo quiere ser respetado y envidiado por sus compañerxs más retrógradxs, e idolatrado y obedecido ciegamente por sus alumnxs. Es decir, que oculta los móviles patológicos de cualquier dictador de medio pelo, o lo que es lo mismo, en su conducta laten el narcisismo y el ansia de poder y de dominio, disfrazados de inconformismo ácrata antisistema. En este protagonista, se identificarian entonces las motivaciones y actitud de un líder de masas megalómano con las de un anarquista, adjudicándoles a ambos un supuesto complejo de inferioridad solapado con una pose "nihilista" o de "rebelde sin causa". Por otro lado, nos encontramos con un alumno marginado, en cuyo hogar las armas son más accesibles y abundantes que las palabras. El adolescente representa al típico chaval de clase media, falto de autoestima, con unos padres poco afectivos, ideológicamente situados en una derecha radical, (es decir el retrato robot que nos ofrecen cada cierto tiempo los telediarios del chico frustrado que acaba a tiros en el colegio o en algún Burguer), y que será el más ferviente seguidor del proyecto, donde encontrará una causa que defender y donde poder realizarse. Para terminar, está la estudiante modelo, representante de la juventud políticamente correcta, con unos padres amorosos y permisivos, una joven culta e independiente, hija del Estado de Bienestar y heredera de sus valores y de su educación progresista, solidaria y liberal. Por tanto, ella se opondrá visionariamente desde el principio al proyecto de La Ola, junto a otra chica que se muestra como la típica hippy con rastas. Estos tres personajes, necesitarán para complementar el cuadro social estereotipado, al grupo de niños pijos y gamberros de padres con mucho dinero que nunca están en casa, al chaval fruto de un matrimonio deshecho y desestructurado, sin padre y con una madre alcohólica, a la chica poco agraciada y acomplejada por ello, y al inmigrante turco, todos ellos, por sus diferentes complejos, o por mero aburrimiento, se suman con entusiasmo al proyecto de La Ola. En conclusión, se muestra una serie de caracteres extremos en adolescentes que justificarán el funcionamiento del experimento.

Una de las paradojas que se extraen rápidamente del film, es que en las familias felices, políticamente moderadas y económicamente acomodadas, con una educación democrática y culta, el experimento no funciona. Sin embargo, surte inmediatamente efecto en los chavalxs insegurxs, marginadxs, débiles, mimadxs o trasntornadxs. Pero ¿porque acudir a prototipos bidimensionales, típicos y manidos? No es necesario justificar el experimento psicoanalizando caricaturas, pues en la realidad ocurrió entre adolescentes bien alimentadxs y educadxs, con sus conflictos como cualquiera. Es más, en la realidad, el pueblo alemán se votó al nazismo, en Italia se creyó en el fascismo, en España, triunfó el franquismo, en Chile, Pinochet murió de viejo...etc En todo caso, lo que vemos en la película es que unos individuos esculpidos por una sociedad generada en un sistema hostil como el capitalista, jerárquico y elitista es un caldo de cultivo de actitudes fascistas. ¿Que adolescente no tiene algún trauma, debilidad o mezquindad? ¿Que ser humano no queire sentirse querido y apreciado por el resto? Si asumimos las premisas de la película, ésta nos conduce hacia una conclusión irrebatible: tenían razón la alumna modelo y la hippy, y el radical e irresponsable profesor suponía un peligro(al igual que el anarquismo y el nazismo). El profesor es castigado y detenido porque no ha alcanzado la mayoría de edad que es necesaria para renunciar a utopías dañinas, y para aceptar la realidad democrática capitalista, su ego y su infantilismo enloquecieron al potencial psicópata, que no pudo soportar tener que renunciar al ideal vacío de La Ola, que para él significaba simplemente estar integrado en un grupo: ser alguien. Es decir, que un profesor de ideas "antisistema" no debe hacerse cargo de adolescentes, pues son manipulables y pueden terminar cometiendo disparates, hasta llegar a matarse a sí mismos o a los demás.
Por otra parte, es importante enfatizar el sentido de la competición entre el grupo de La Ola y el grupo anarquista, también reducido a un estereotipo superficial, en el que se coloca a una banda de yonkis con crestas, enloquecidxs también por la pertenencia a un grupo que sería equiparable al de la ola, es decir, un grupo que solo proporciona una identidad colectiva, bajo una estética y una insignia que no significan otra cosa que "¡Nosotros!" y por prolongación las pintadas no son otra cosa que "Nuestro Territorio"(cual meada de perro). Y como el nosotros se genera como máquina de guerra, es decir, que necesita de un enemigo para consolidarse frente al "Vosotros, que amenazais nuestra identidad y territorio", el film no hace más que vaciar y homogeneizar nazismo y anarquismo através de un fenómeno de guerrillas callejeras, de tribus urbanas propias de la globalización capitalista. Este fenómeno que existe, (y que siempre que haya desigualdades, miseria y marginación seguirá existiendo) responde a la animalización que provoca un sistema embrutecedor y competitivo, que margina y criminaliza a lxs más desfavorecidxs. Este tipo de bandas, normalmente adolescentes, no tienen nada que ver con las ideologías que se proponen como alternativas al sistema político-económico impuesto en la actualidad. En la película por tanto se distorsiona por un lado la noción y el concepto de ciertas ideologías y planteamientos políticos que se oponen el sistema vigente en nuestras sociedades(en un época en que la gente no tiene una educación ni una formación política e histórica en absoluto rica y bastante sesgada y distorsionada), por otro lado, desvirtúa la realidad del experimento, y por último distrae sobre las causas de los problemas que realmente existen en la juventud actual de los países llamados civilizados, (o simplemente los países ricos, o los países occidentalizadores) y tras ellos los países occidentalizados o en vías de desarrollo.

Nadie es incorruptible, el poder saca lo más sucio de cada persona, todxs tenemos debilidades que salen a flote si nos permiten aplastar, dominar y reducir al otro a nuestros caprichos. Un anarquista dejaría de serlo si traicionara un principio básico de su propio ideario, que constituye todo su sistema de pensamiento y es que "el poder corrompe"y que le separa radicalmente en los medios de otras ideologías como la comunista o la socialista. Un anarquista de verdad no asumiría jamás el mando, porque sabe lo peligroso que es y porque conoce la ilegitimidad de las jerarquías y de los gobernantes. Negarse a que exista ese lugar de poder es lo que le caracteriza frente a cualquier otra forma política o económica, no hay privilegiados en una sociedad anarquista, y por eso, (ya que estamos lo aclaramos), tampoco el liberalismo económico es anarquista, porque el anarquismo no se opone al poder del Estado solamente, sino a cualquier forma de dominio, de privilegios, de propiedad privada, de representación o mediación en la administración del poder...y por todo ello es contrario a los dos Amos por excelencia: Dios y Dinero, que en el neoliberalismo terminan siendo uno.
Es ilustrador ver como se le sube el poder a la cabeza al profesor marginado, que de pronto se siente capaz de comer la cabeza a cualquiera, de ser admirado...el idealismo le corrompe pq se convierte en eso que quiere criticar, eso que odia, porque conocer el mal significa volverse malo, como dice Spinoza, igual que conocer la enfermedad significa padecerla, estar enfermo. Imponer una idea siempre es una forma de fascismo..Además en la ola no hay un contenido, se habla de unidad, de ayudarse, de formar parte de algo, de vestirse igual...pero no se habla de defender nada, son consignas vacías, un saludo, un símbolo, pero nada detrás...La Ola podía ser cualquier cosa, le falta contenido, es una mera forma de sociabilización, de agrupación, de animalización, un dispositivo de guerra que se alimenta de la unidad y la cohesión frente a los diferentes, los otros...Como bien dijo Carl Schmitt, ideólogo del nacionasocialismo alemán, la guerra supone enfretarse al otro como totalmente diferente, uno mismo se atribuye todo lo positivo y al otro se le ajudican todos los valores negativoa a exhorcizar, la amenaza por excelencia, sin necesidad de conocerlx. El enemigo como forma de afirmar la propia identidad por negación.
Un/a anarquista coherente no se dejaría enredar en la trampa del conductismo, y no trataría de demostrar algo que sabe, así que negaría por principio la autoridad, que imposibilita la igualdad de derechos, que niega la autonomía y la posibilidad de que cada cual se desarrolle por sí mismx, la cooperación y la idea de una igualdad entre todxs, no el enfrentamiento del ser humano contra el ser humano, no la idea de que el/la otro/a se opone a mi libertad, sino por el contrario que el/la otro/a es la condición de posibilidad de mi libertad, con el otro me construyo en tanto que me reconoce como libre parafraseando a Bakunin. La cooperación entre iguales, distintxs, individuos con sus propios deseos que tratan de llegar a fines comunes, pero sin imponer a nadie las propias inquietudes, sino llegando a acuerdos por la reflexión y la discusión, no imponiendo la voluntad de un gropo (ni minoritario ni mayoritario) ni por la fuerza ni por unas reglas escritas, sino que las reglas se fundan en la recíproca comunicación y en el respeto. Las decisiones se toman según cada circunstancia, entre todxs. La autoridad desemboca en una forma injusta de organización del poder, pq es un comienzo de por sí injusto, algo impuesto, que permite que alguien pueda elegir por el resto, desde sus caprichos, sus crueldades, como obviando la falta de voluntad e inteligencia del resto, e ignorando sus necesidades y deseos... Un/a auténtico/a anarquista opondría su experimento a otras formas de gobierno, hablaría de otro tipo de solidaridad, mostraría lo peligroso del nazismo, lo dañino, sin dañar a los alumnos, les explicaría porque no necesitan un líder, probaría a realizar un experimento desde el asamblearismo para fomentar una cohesiónde grupo libre, solidaria creada por ellos mismos. No se explica la enfermedad enfermando al estudiante, el poder corrompe, al amo/a y al esclavo/a, al político y al votante, al sacerdote y al creyente...

20 de febrero de 2009

Sin tiempo

Se buscaban en la sombra de pórticos góticos. Por la noche observaban la luna sobre ataúdes de mármol y granito. Siempre silenciosos, entre tímidos murmullos, jugaban a estar juntos. Rompían la distancia dibujando futuros que hubieran sido posibles, que podían haber sido, si ellos dos hubieran podido ser. Eran niños, tan inocentes y pequeños, que no entendían porqué sus bracitos no podían abrazar. No comprendían que el frío aire que les envolvía en el fingido abrazo no eran sus cuerpos. Pero pese a todo se buscaban, y se buscaban tanto que se herían a fuerza de no sentir dolor.

No entendían que ni siquiera les envolvía el aire, que al abrazarse ni si quiera abrazaban. No entendían que no podían hablar porque sus labios estaban sellados, que no podían caminar porque sus piernas se las llevó un camión junto a todo lo demás. No podían ver que sus lágrimas sólo eran gusanos y raíces. No entendían, en su abrazo eterno, que no había tiempo para el futuro, que el pasado carecía de sentido, que sus lenguas de fantasma nunca sentirían el sabor de un beso.

3 de febrero de 2009

Vicios, drogas y dependencias


Definición de drogadicción



Se denomina drogadicción a un estado psíquico y físico causado por la interacción entre un organismo vivo y una droga, caracterizado por modificar el comportamiento, y por otras reacciones que comprenden siempre un impulso irreprimible al ingerir la droga en forma continua o periódica con el fin de experimentar sus efectos psíquicos y a veces para evitar el malestar producido por la privación.

La dependencia hace creer y sentir que no se puede vivir sin consumir el objeto de la adicción, y se utiliza permanentemente y de manera compulsiva. Provoca una imperiosa necesidad de consumir la droga y en caso de no calmar dicha urgencia produce un desplome emocional y física, con síntomas de abstinencia como: angustia,debilidad, agresividad, náuseas, inseguridad, confusión, alucinaciones, depresión...

En definitiva, un drogadicto no puede concebir su existencia si no es consumiendo la droga o drogas a las que es adicto, anula su voluntad y no es capaz de renunciar a ella, aunque sea consciente de los problemas derivados de ésta, que son de todo tipo: físicos, psicológicos, sociales y financieros.







































Estoy rodeada de viciosxs-adcitxs por los cuatro costados. Vicio, vicio, vicio... y nada más que vicio... Adicciones disfrazadas de puro hedonismo, conformismo o fatalidad, pero todas adicciones patológicas, igual de feas, aunque vayan montadas en su cabalgata de carnaval. Por un lado aquellxs que se refugian en la embriaguez para rendir culto al Dios del Olvido. Lo veneran mediante diferentes ritos: etílicos, alucinógenos, estimulantes, relajantes..etc, Emplean desde las drogas más comerciales y aceptadas socialmente, hasta las desprestigiadas y malditas por los Medios de Comunicación (= Formación) de Masas. Vamos, los que según los preceptos morales instituidos por los que mandan ( informan) son etiquetados explícitamente como viciosos patológicos: drogadictxs, toxicómanxs yonkis.






Pero yo no me refiero sólo a los canutos, las copas, los pitis, los chinos, las rayas, los chutes, los tripis, las setas...etc...Sino a muchas otras sustancias y a muchas y variadas actividades que no necesariamente suponen ingerir "drogas" aunque sí un consumo adictivo y compulsivo.
El vicio como adicción promueve todo tipo de peregrinaciones, las discotequeras, las gimnásticas, las barranquilleras, las poligoneras, o las cunderas. Unxs buscando mantener o lograr el éxito y prestigio social y/o artístico, y lxs otrxs haciendo gala del gorroneo, el acoso, el delirio, el ridículo y tratando de sacar partido al miedo y a la caritativa compasión.


Todxs huyendo de sí mismxs, tratando de agradar, de adaptarse, de distinguirse o de diferenciarse. Algunxs viven en hoteles lujosos, en sus casas, en casas de alquiler, o en okupas... otrxs van alternando la hospitalidad y paciencia de sus colegas, otrxs duermen en la calle, en bancos, en parques, en albergues, y muchxs ya están encerradxs en centros psiquiátricos o penitenciarios...


Pero también están lxs zombis atados a la cadena laboral y consumista legal, aceptada y promovida por la ideología dominante, que es la del mercado, la de la gran Iglesia Cientifíca-Tecnológica-Publicitaria. Dentro de este grupo están lxs mojigatxs que se han entregado a la pura y santa abstinencia, los mártires gratuitos que se gastan a sí mismos, mediante el dinero y el tiempo. Son quienes creen que al incrementar su adrenalina comprando y luciéndose en el escaparate virtual y caduco de las modas, serán libres y felices, sin entender que ya están dentro del círculo vicioso del consumo ( +consumo= +necesidad de consumo...). Son lxs que creen que la cocacola lo cura todo y que van a la farmacia, a misa y al gimnasio en lugar de al bar o al parque, y se atiborran de ideologías, antidepresivos, anabolizantes, diuréticos y televisión. Presxs de un miedo sin fundamento a aquello descononocido, o que una vez no comprendieron y que no supieron manejar superándoles. Miedo a unas drogas porque han sido malditas por el dedo "aleatorio" de la legalidad, pero adoración ciega y acrítica por las adicciones que el sistema crea para su buen comportamiento. Las drogas de todo tipo, su parcelación, su comercialización, su ilegalización y su persecución son un sofisticado medio de control y exclusión social.
Por supuesto esto no significa como muchxs creen que toda droga proviene del poder, que para luchar contra el sistema es necesario ser un sobrio trabajador, vegano, mengano y abstemiano...pero ni siquiera esos se libran de sus adicciones, aunque sea a la soja y al centeno, a la marihuana y a las charlas purificantes del movimiento más antisistema. Pero las drogas estaban ahí antes, y no son nada más allá del uso que se les de.



En conclusión, somos y vivimos rodeadxs de peleles. Unxs que lo son por ingerir, esnifar, inhalar o inyectarse substancias que los controlan, y otrxs por llevar una vida adictiva por rechazar cualquier cambio, cualquier riesgo por aferrarse a la condena de lo mismo, condena que infunde en sus cerebros la idea de que cuanto menos movimiento menos riesgo, y menos riesgo más felicidad. Esxs otrxs que parecen sanos y se hunden bajo sus ojeras, sus frustraciones, su resquemor contra la vda y su rabia contra la felicidad ajena. Esxs que son enfermos por miedo a actuar, se sumergen en la visión y la rutina, renuncia a la vida a cambio del espectáculo, del mundo virtual, los videojuegos, la televisión, los chats, los foros, los centros comerciales...etc. Esa fotofagia compulsiva, esa urgencia por poseer imágenes, por crear apariencias diarias para ser aceptadxs por los grupos virtuales de las tribus, por ofrecer todos nuestros datos a los tiranos y policía, se los regalamos..igual que regalamos nuestras imágenes a aquellxs que deben juzgar si somos actractivxs, guays, radicales, divertidxs, originales..etc.. Internet, ¿quien se resite a su influjo, a su poder seductor y adictivo? ¿y cuantos malos usos derivados de este instrumento podemos enumerar?


Me enfado, refunfuño, y grito ¡No al prozac! ¡No a los libros de autoayuda! ¡No a las religiones de todo tipo! No, no y no a los viciosxs que ignoran su adicción y señalan con el dedo a lxs demás. ¡Nooooooooooo!


Pero a estas alturas me veo obligada a recurrir a un antiguo griego defensor de las jerarquías, un misógino y esclavista, formador de tiranos, pero a pesar de todo, un gran sabio,(hay que coger de cada cual lo que nos convenga..ya le despellejaremos en otro apartado) que vivió hace más de 2000 años, voy a parafrasear sus palabras que me vienen al pelo para lo que aquí nos ocupa: Hay que buscar el término medio, y ese no tiene un valor universal, sino que cada cual debe saber qué le sienta bien y qué mal, en que medida, en que dosis, en que proporción y con qué frecuencia debe hacer ciertas cosas. (quien haya leído la Etica a Nicómaco que me perdone mi libre interpretación...asi somos lxs hermeneutas). Aristóteles habla de comidas, de ejercicio, de alcohol, de sexo, etc...es decir, que cada cual ha de tener un conocimiento de su propio cuerpo, de sus necesidades, de sus debilidades, de sus puntos fuertes, y saber premiarse y controlarse... para ser más feliz y nunca buscar la "felicidad" en una supuesta comodidad o conformismo, ya sea de abandono como de total autorepresión, pues ambos son formas de esclavitud, inhumanas, contra la vida, que abolen la voluntad.
El mundo está lleno de cobardes y nihilistas, unxs se creen rebeldes, especiales..., lxs otrxs se creen purxs; unxs niegan tener objetivos, los otrxs se creen iluminados, pero no dejan de ser unos mojigatxs que creen que los que no supieron manejar, es lo malo por excelencia, ambos carecen de voluntad. Echan la culpa a otrxs de su propia debilidad...Las drogas no son malas en sí, no hay Mal, hay encuentros más afortunados y menos afortunados, unas fisonomías y otras, unas debilidades y unas fortalezas. ¡Débiles! Aceptad vuestra debilidad. ¡Fuertes! Aceptad vuestra fuerza también.



Adict@ no es quien tiene sus vicios y los disfruta, sino quien no tiene medida, quien los huye por miedo o ignorancia, o el que se rinde tras una mala experiencia, el que no sabe ajustarse a su propia medida sin dejarse vencer. Viciosx es también quien no sabe decir hasta aquí, o el que lo dcie radicalmente porque no tiene la voluntad para disfrutar o aprender de las experiencias que permiten las drogas. Perjudicial es perder la noción de la realidad y sólo ver las drogas, ya sea como consuelo y refugio, ya sea como amenaza y mal supremo.


Experimentar abre la mente, hay que aprender a decir que "no" a aquello que si que nos gustó pero que no sabríamos medir, nunca decir que no a aquello que nos desagradó porque no supimos aprovechar, porque si un día por una resaca renuncias a volver a tomar una cerveza estás condenándote por tu primera falta de conocimientos. Decir que no sin conocer, es puro miedo reaccionario. Además, los "no" son siempre contingentes, para un momento determinado...No debemos obsesionarnos con ser siempre los mismos, pq nuestro cuerpo, nuestra identidad están en constante mutación...


No debemos rendirnos ante las dificulatades, pero aprender a dosificar aquello que más nos agrada, para que no nos haga perder de vista otras cosas, que no nos impida disfrutar de la vida. Lograr extraer lo positivo de lo desagradable, el conocimiento y los límites de lo agradable. Racionar y probar, experimentar, y descrubrir quienes son los mejores compañeros de viaje, lxs amigxs que alegran y enriquecen con sus palabras, sus abrazos, sus miradas...los cómplices y camaradas, y distnguirlos de los que roban la energía, enflaquecen la voluntad.. es decir, las compañías prescindibles. Elegir las drogas que destruyen, las amigas de un rato, ocasionales impredecibles, y por ultimo las drogas para las ocasines excepcionales, las tiranas, pero las más bellas. Sumergirse en las drogas por no saber como enfrentarse a la vida es lo mismo que huir de ellas por miedo a perderse, como si la identidad fuera algo que pudiera preservarse.

Difrutemos de la vida en pleno devenir... dejándonos unas veces arrastrar por la marea a donde nos lleve..., otras dominando la corriente para quedarnos donde estamos...,y otras aprovehándonos de las olas para llegar donde queremos.



Y para acabar, unas sabias frases de un experto en el asunto, es decir, Evaristo:



"Dime amigo ¿Como lo ves? ¿Es del derecho o del revés?


cada droga tiene un valorsegún esté a un lado o al otro de la ley


lo prohibido es caro y lo legal también


Háblame del problema de la drogadicción


cuentame si en tu curro peloteas con el partón


¡Viva la tolerancia de la revolución!


¡Viva la hipocresia y la madre que nos parió!


¡Viva la teoría todos somos igual..


menos el que se droga, si la droga es ilegal


¡¡La droga más potente es la televisión


Dale con la cabeza y rompe la pantalla!!"

De Legal, The Kagas

26 de enero de 2009

Cáncer de la moralidad

No sabes que te persiguen. Corres y corres buscando un refugio, y crees que así estás alzando un mundo diferente, ese en el que crecerán tus hijos más sanos, más fuertes, más listos. Crees que tú y tus amigos sois mejores, que lograréis algo en algun futuro lejano y que vuestra palabra es profecía...¿Y vosotros os burlais de las religiones? Yo si que me río...Si, déjame que me ría de tí, de tus ideas, de tu hipocresía, de tu fanatismo al fin. Deja que me burle y te diga que eres un gilipollas, un moralista, un mentiroso, un enfermo. Crees que eres distinto, y eres demasiado igual a tí mismo, a tu enemigo y a tu héroe. Eres la esencia del fascimo, crees que hay verdad, que hay UNA VERDAD, y que esa verdad es la tuya. No me hables de pureza ni mestizaje, no me hables de utopía o realidad, de mundos posibles, de mundos malditos...borra de tu vocabulario las palabras libertad o igualdad...haz que vivan tus palabras cada vez que te levantes. Haz que compartir sea cosa de cada instante, que no haya dinero en tu pensamiento, que tus valores no entiendan de medidas ni de precios, ni rentabilidad. No dejes que el mercado ni el fascismo aniden en ti. No acumules, olvida la avaricia que tanto criticas al capitalismo, deja esa estética maldita, y roba siempre al que roba. Haz que el amor sea libre, que ni el estado ni las inmobiliarias se metan en tu cama, en tus besos, en tus amistades, no dejes que te hagan creer que amar es poseer. No hagas de tus actos un credo no escribas las leyes ni te ensucies las manos mandando. Nunca bajes la cabeza ante nadie, no permitas que elijan por tí, que nadie te mande, haz eso que dices, pero no hables tanto, actúa...No permitas nunca que el enemigo sea un aliado, ni siquiera provisional. Haz que tus palabras sean actos, que tu odio se convierta en puñetazos. Tú, que sólo sabes obedecer y vas de rebelde, quema mis palabras, haz las tuyas...y vuelvo a reirme, es absurdo dar consejos, es contraduictorio decirte esto, es inútil luchar por liberar borregos, beeee beeee....los lobos se van a poner las botas...como siempre...Y mientras tanto tú seguirás siendo el reflejo de eso que supuestamente atacas... Utilizas a tu chica como estandarte , como adorno o juguete, cantas canciones que piden su libertad y sus derechos, pero no mueves un dedo más que tu padre por hacerlo realidad. Te burlas de los pijos y modernos, pero te tuneas más que un coche de diseño. Hablas de compartir, de las decisiones asamblearias de antifascismo y antimilitarismo, de liberación de presxs y animales, pero eres el más gorrón, el más sectario y el más sumiso, hipócrita que predicas grandes ideas que no sabes llevar a cabo ni con tus amigxs más cercanxs. Pequeño y vulgar perro ladrador, eres un cerdo estafador. Serías un buen tirano, porque sólo manda el que sabe odedecer, y tú eres sumiso y cobarde, peligroso ignorante, que no sabes que sólo puede ser libre quien que lucha por liberar a lxs demás...ñam, ñam...

Quiero pedirte que dejes de ser alguien

Ven y aparece, reaparece, deja que me olvide de que esto es un sueño que nunca podría ocurrir...deja que te bese despacio, para que te quedes aquí, para obligarte en este delirio a lo que nunca me atrevería a pedir...A pedirte, a tí, por primera vez, que te quedes... Precisamente a tí, porque no eras nadie, porque eras un insignificante prototipo tímido y huidizo, porque te creías especial y te desprecié por ello. Porque has pasado de ser alguien que estaba ahi, sin más...de ser una anónima presencia emulando a algún estereotipo del Pop, musa de frikis sin ideología, para pasar a ser la única compañía que deseo.
Despiertas en mi un deseo ambiguo pero ardiente...deseo, deseo, puro humo, puro sueño...estoy harta de tantas palabras, quiero que me abraces y nos fundamos, que nos olvidemos de tus gustos y los míos, de tu formación y de la mía, del cine, del teatro o de la filosofía...Escabullirnos de la estética, de las consignas y los roles...quiero arrancarte la ropa, las frases hechas, los conjuros de la seducción, las risas infantiles de pupitre, quiero ahogarme bajo tu cintura y dejar que me muerdas con suavidad, como haces en este sueño que escribo sobre las sábanas revueltas, donde tu cuerpo duerme sin saberlo. Necesito que me mires como ese día, que me mires como cuando me resultabas indiferente, quiero sentirme de nuevo fuerte ante tus manos, quiero volver a reir despreocupada mientras tú balbuceas...
Reaparece, junta tus manos con las mías y borra todo tu imaginario, deja que nos devore esta luz que manejo en la soledad, deja que esta vela descubra que nuestros cuerpos, tan diferentes y fríos son iguales, deja de alejarte con excusas y cierra esa boca dentro de la mía...deja que te arrranque esa identidad de pegatinas y chapas y te muestre el imperio de la piel desnuda.
Quiero el silencio, estoy cansada de tanto ruido, de tanta publicidad, quiero verte a tí, como te veo en sueños, quiero que me columpies tras el escenario, quiero que me muestres el misterio del sonido y de la luz que tú manejas entre bambalinas...quiero que tu cuerpo y mi mente se olviden de tanto teatro y volvamos a la inocencia que interrumpimos cuando quisimos ser alguien.

22 de enero de 2009

La muerte, la conquista del silencio

El sistema penitenciario nunca ha descuidado ni un solo detalle. Es una institución antigua y sabia. Se caracteriza por ser minuciosa, jamás ha renunciado a estudiar e investigar nuevas formas de infringir dolor, desesperar o enloquecer. No ha desperdiciado ningún parámetro, no ha renunciado a ninguna ciencia, arte o religión para descubrir y aplicar las más sutiles y diversas sensaciones. Nunca ha olvidado medir y jugar con la temperatura, la humedad o sequedad, la luminosidad, las cualidades de los materiales, las dimensiones y proporciones de sus edificios, maquinaria y herramientas...
Aquí se ha procurado que el espacio mutile inutilizando el cuerpo y deteriorando la imaginación; han conseguido que la humedad enferme a base de encharcar las articulaciones lentamente; han procurado que la oscuridad ciegue; no han olvidado que la soledad y el silencio deshumanizan, y finalmente, no han renunciado a las viejas verdades: el tiempo, tanto su exceso como su falta, siempre matan.

Hace frío, lo se, pero no lo siento. De tanto esperar un rayo de sol, me atrofié. Ya no padezco, no puedo ni temblar. Soy una piedra más adosada al muro gélido. No recuerdo cómo sonaba mi voz, ahora truncada en un jadeo sordo alternado con alaridos que no salen de mi boca, sino de algún lugar recóndito más allá de mi estómago. Esta celda, que me arrebata la luz se ha vuelto parte de mi piel. Estas rejas que dan forma a mi mundo se me han clavado en los ojos. Me confundo con mi mierda y ya no se si hablo o vomito, si pienso o me pudro.
No me reconozco desde que sufro este encierro, un tiempo indiscernible, incalculable. Desde que esas coordenadas temporales me atascaron en el olvido, me he convertido en algo ajeno a mí mismo. Lentamente el odio dejó paso al cansancio y al asco, ya ni pienso en los culpables, verdugos, burócratas del poder. He renunciado a gastar fuerzas, es decir, a consumir los despojos de vida que me han perdonado, maldiciendo seres abstractos o humanoides manejados por el mercado. Ya no grito contra la estructura que me engulló con sus dientes de acero y que con su saliva viscosa y uniformada me escupió dentro de esta jaula inhumana. Tampoco impreco contra políticos, empresarios ni banqueros. Ya no me cabrea estar aquí por culpa de un cerebro difuso que controla el descontrol, el fluir de números y objetos extraños con los que nos ordenan y aniquilan. Ya no pienso en ese mundo de afuera, gobernado por valores y consignas que nunca comprendí... Ese mundo que para funcionar necesita que yo me pudra aquí ejemplarmente, que requiere de presxs y ciudadanxs, policía y miedo, amos y esclavos, gobiernos y empresas, guerras y hambre, todos esos circuitos que se necesitan y que se buscan entre sí, que se persiguen y pierden por los caminos áridos de la llamada Historia. Esa realidad que nos aniquila para poder continuar. A estas alturas no me importa, "tengo el cuerpo derrotado, el alma hecha añicos"... Sólo siento que mi cuerpo se descompone, se separa y yo me voy perdiendo por las fisuras, por las grietas.
Bebo agua sucia con fideos de letras que vaticinan un futuro oscuro y ácido. Ya no muerdo ni siquiera el pan, se me rompieron los dientes contra tu nombre, me rompieron la boca por nombrarte, por buscarte... por denunciar a la farsante que usurpa tu identidad, por gritar contra la falsedad y tu falta. Si, por luchar por tí, mi amada Libertad. Pero, ¿dónde estarás ahora? ¿Dónde te han mandado? ¿Por qué me abandonaste? ¿Por qué nos dejaste a los que te defendíamos caer en su trampa?

Grito y grito, y sólo me constesta el silencio de un futuro todopoderoso, el silencio de mi voz, el silencio de mi muerte.